El conflicto del Sahara Occidental se está desnaturalizando o, mas bien lo están intentando desnaturalizar de un modo muy "descafeinado". Leyendo el último informe del Secretario General de Naciones Unidas respecto al conflicto del Sahara Occidental, uno no puede mas que alarmarse por la nueva interpretación que le quieren dar a la naturaleza del conflicto.
Me sorprende sobre manera, el hecho de que, el Señor Kofi Annan haya podido redactar dicho informe en los términos en los que ha sido publicado, sin tener el consentimiento previo (directa o indirectamente) de ciertas fuerzas muy influyentes en el Consejo de Seguridad. En algo o aleguen se tuvo que apoyar el Señor Annan para atreverse a presentar un informe, que hecha por la borda todo lo aprobado anteriormente por los distintos órganos de la mismísima organización, y mas grave aún, cuestiona la esencia misma del conflicto. De nada nos vale el hecho de haber sido modificado o "corregido" el texto de la resolución final, porque esto, no cambia en nada de lo públicamente manifestado y de lo que aparentemente esta convencido el Señor Annan. Que por otra parte, sigue siendo el Secretario General y es a quien le corresponde elaborar el próximo informe sobre la situación del conflicto. Lo dicho por Annan dicho está. Intentando seguir el hilo del jueguecito de las declaraciones a las que nos tienen acostumbrados todas las partes (todas siempre salen satisfechas) después de cada resolución, yo diría que Annan le ha solucionado la difícil papeleta a la siempre RENOVADORA y RENOVABLE dirección del Frente Polisario. Me explico, el Señor Annan viene a decirle a los representantes saharauis y por extensión a todos los saharauis (estos últimos lo saben de sobra) que el conflicto saharaui no interesa a los grandes, que la causa saharaui ya no tiene cabida en Naciones Unidas y que francamente le están aborreciendo. O sea, nos está invitando a reiniciar la lucha armada, a armar la de Dios en la Intifada, a negociar directa o indirectamente y a mover el esqueleto. En definitiva, nos incita a hacer algo, y bien sonante, parque se nos tenga en cuenta. Nos quiere hacer ver lo que nuestra dirección no puede o no quiere ver. No tengo del todo claro, ¿qué es peor, hacerle caso a Kofi Annan o a seguir agarrándonos a un "clavo ardiendo", o sea, al dichoso Plan Baker II?.Hablando de planes, y basándome en mis fuentes, que no son nada seguras, se esta rumoreando sobre el próximo plan para desbloquear definitivamente el conflicto del Sahara Occidental, presentando una "solución política justa, duradera y mutuamente aceptable", ¡¡¡ me gusta lo de mutuamente!!! se está comentando que se va a llamar, "Plan del Holandés". Este plan consiste sencilla y llanamente en dos fases. En la primera fase se va a celebrar un referéndum en el que participarán única y exclusivamente aquellos que estén en las listas resultantes del último y fatídico proceso de identificación, llevado a acabo por la MINURSO. En la segunda fase e independientemente del resultado del referéndum de la primera, se dará paso, de inmediato, a una AUTONOMÍA de CIEN años de duración, tras la cual se aplicará el resultado del citado referéndum. ¡¡¡Luego no me dirán que este plan, no nos vaya a tener contentos a todos!!!!! Algo es algo.SIDAHMED ALMUSTAFTI
1/05/2006
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