El ministro de extreriores marroquí, Mohamed Ben Isa, o Benaissa, o como se le quiere llamar, envió una carta, el primero de febrero, al Secretario General de la ONU, Kofi Anan, entre otras cuestiones decía: "para llamar la atención sobre la gravedad de lo que está ocurriendo en la "zona de amortiguación" realizada por las demás partes".
Para Ben Isa, nuestras Zonas liberadas, se llaman "Zona de amortiguación". Y en su misiva lo explica con la habitual retórica al que nos tiene acostumbrado el aparato del Majzen:"La zona de amortiguación que se mantuvo, entre el muro de seguridad y la frontera con Argelia...".
Más bién debería haber dicho la frontera con Mauritania, por que el Sáhara comparte más frontera con Mauritania, que con Argelia, que no llega al cinco por ciento.
Dice que con esa "zona" se pretendía atenuar las tensiones entre las partes" (¿Y quién creó esa "zona" que pretendía atenuar la tensión entre las partes?, habrá que preguntarle a Ben Isa -y subraya- que no tuvo nunca la intención de consagrar una división del territorio o de legitimizar la noción de "territorios liberados".
Aunque entre comillas reconoce que se les llama "territorios liberados"
"Se trata de una zona de amortiguación inhabitada"-dice Ben Isa.
Y si las Zonas liberadas son inhabitadas por qué le preocupa tanto que en Tifarity se esté construyendo un poblado, Cuando habla de que "las partes" (Para Ben Isa las "partes" son El F. Polisario y Argelia) tratan cada vez más de imponer una política de hechos consumados en la "zona de amortiguación", construyendo edificios y llevando a acabo actividades diplomáticas, llegando incluso a suscribir acuerdos con empresas petroleras".
Para Ben Isa, la ocupación del Sáhara Occidental durante treinta años no es un hecho consumado, ni le preocupa la represión que sufren diariamente la población saharaui en las zonas ocupadas.Ni el constante saqueo de sus recursos naturales; esos no son hechos consumados. Ni tampoco negarse a celebrar el Referendum de Autodeterminación.
Esa política de intansigencia, de no aceptar nada más que una autonomía para el Sahara, eso para Ben Isa, no es un hecho consumado.
Ni el Rey alaui, ni su gobierno, ni los medios de comunicación de ese pais, especialmente la MAP (la agencia marroquí de desinformación y difamación) han cejado en su empeño de utilizar esa retórica. Y han domesticado al pueblo marroquí en repetirla sin cuestionarla nunca.
El Sáhara Occidental, terminología reconocida y utilizada por las Naciones Unidas, para ellos es "el sahara marroquí". Las zonas ocupadas del Sahara Occidental, están verdaderamente ocupadas, porque hay un ejército de 160 mil soldados, que reprime y asesina hace tres décadas y lo sigue haciendo; Marruecos utiliza el eufemismo de "Provincias del sur".
A los refugiados saharauis, les llaman "secuestrados". ¿Quiénes son los "secuestrados"?, si Marruecos abriera de par en par sus fronteras el 70 por ciento de su población emigraría a paises Occidentales, y eso lo corroboran encuestas muy fiables, por no hablar del real flujo ininterrumpido de pateras.
La retórica de Ben Isa y su gobierno no cesa. Es increible, como un pais ocupante, que atropella diariamente los derechos humanos de los saharauis y de los marroquiés pretenda "denunciar" que los saharauis hagan lo que quieran en la parte que han liberado, con muchos sacrificios, y de manera legítima
¡Qué descaro! ¡Qué desfachatez!.
La política de los hechos consumados,de la que habla Ben Isa, es lo que ellos más practican. Por lo tanto nuestra esperanza, está en la Intifada de la Independencia, pero también en gestos que pueden preocupar a Marruecos: como la celebración de aniversarios en las zonas liberadas.
Tifarity, es la esperanza en la vuelta.
Tifarity, es el símbolo de que se invierte en algo duradero, sin incertidumbres. Construir en Tifarity, es un paso hacia adelante, un paso irreversible hacia la independencia.
Limam Boisha
09.02.06