EL POLISARIO ANIQUILA LA RASD
"Entonces, viva la II República"
Huneifa ibnu Abi Rabiaa
El programa Informe Semanal de la TVE1, en su edición del pasado sábado 15 de abril, debió llamarse Informe sobre el Estado de una Nación. Cuando el reportero aborda al niño preguntándole qué quiere ser de mayor y el pequeño contesta que de mayor quiere emigrar a España para trabajar, lo que estamos viendo ya no es el Informe Semanal, sino el Informe sobre los esfuerzos de 30 años de lucha, exilio y existencia del Estado saharaui.
Si la aceptación del Plan Baker II supuso la autoliquidación jurídica de la RASD, la angelical y sincera respuesta del pequeño niño supone la aniquilación del sustrato social del Estado saharauai.
En efecto, la aceptación por parte del POLISARIO del Plan Baker II, supone una auténtica aniquilación del Estado saharaui, a la que es aplicable toda la doctrina de los actos o declaraciones propios emanada de Corte internacional de La Haya a propósito de las declaraciones del Estado francés sobre las pruebas atómicas en Muroroa. Entre otras cuestiones que no se plantearon los que, sometidos a mucha presión, adoptaron esa decisión, la más grave es, sin duda, qué hacer con nuestro asiento en la Unidad Africana, donde nuestra membresía está comentada en todos los tratados de derecho internacional público editados después de 1981. Tampoco debieron pensar en qué hacer con nuestras embajadas ni nuestra bandera e himno. No parece que sea razonable traer a colación la experiencia de la fusión de Egipto y Siria en la República Árabe Unida.
James Baker, mismo, no debió estar pensando en un Estado llamado la RASD cuando elaboró su propuesta. Pero aún así, en la medida en que la decisión de aceptar el Plan Baker II se motiva únicamente en la negación segura por parte de Marruecos (Según la versión dada de modo no oficial, por representantes oficiales del POLISARIO), qué va a suceder cuando se presente nueva propuesta con un período de autonomía de cinco o tal años? Podrá el POLISARIO rechazarla teniendo asegurado que Marruecos la va a aceptar?
A parte de los tres archiconocidos elementos constitutivos del Estado, existen otros no tan palpables. Existen otros asuntos que revelan la existencia y vigorosidad de un Estado. Son los llamados asuntos de Estado y cuyo tratamiento exige, normalmente, un amplio respaldo popular y el voto favorable de una mayoría cualificada de sus representantes políticos. James Baker debió sentirse muy aliviado cuando vio el sigilo con que se trataba su propuesta. Debió sentirse, vamos, como negociando un acuerdo comercial con una empresa. Sin cámaras ni micrófonos y con el conocimiento exclusivo de tres personas, máximo cuatro.
Es realmente increíble la aniquilación del Estado saharaui perpetrada por el núcleo duro de la cúpula del POLISARIO al aceptar dicho Plan de Baker. Sin consultarnos han decretado que la RASD, ese logro que tanto nos ha costado, hiberne durante un tiempo "inicial" de cinco años (el entrecomillado se debe a que no se puede garantizar con una seguridad rayana en la certeza que el período de autonomía dure solamente cinco años).
Sin necesidad de recurrir al 18 de brumario francés, procede empezar ya a pensar en la II República Saharaui. Desgraciadamente, aún en el exilio.
Huneifa ibnu Abi Rabiaa
18.04.06
Para contactar con el autor: ibnuabirabiaa@yahoo.es