Siguen siendo las dos. Las dos horas, treinta y cuatro minutos, y cincuenta y seis segundos. (02:34:56) ¡Enigmático algoritmo nocturno! Observaréis, carísimos paisanos, que sumando -así peripatéticamente- los seis dígitos que significan el momento (Ahora), vuelve a resultarnos un dos acompañado también de un cero. Se trata ya de otro momento... de otro "ahora" ...Tal vez, un mismo lugar en la rueda del tiempo.

Llamémonos como nos llamemos, escribamos lo que escribamos, y lo hagamos desde donde lo hagamos, no hallo cabida acá (en esto que denominan hipertexto) para el desasosiego. Tampoco la hallo francamente para el aliento, ¡Lástima grande!

Los saharauis estamos llamados hoy hasta por los fantasmas ¿No habéis visto, acaso, cómo nos estamos entregando ... cómo estamos regando este espacio de tinta sombría ... cómo nos tuteamos una vez más? No me parece, por tanto, Todo Esto, sólo un juego o un entretenimiento detectivesco como sostuvieron algunos compatricios en escritos anteriores, porque los que padecemos cierta insalubridad mental buscamos distracción fuera de estos lares cibernéticos ... Y la encontramos.

Espero que nadie se engañe. Estamos practicando un nuevo saharauismo. Hemos creado, de modo definitivo, el fantasma que quiere y requiere nuestra ilusión.

04.09.04