Cuando El Uali Mustafa Sayed en 1976 proclamó el nacimiento de la República Saharaui, además de ser un derecho de los Saharauis a crear su propio estado una vez retirada España, El Uali queria explotar tambien dicho acto histórico para crear mas presión diplomática sobre Marruecos y Mauritania. Los que pudimos conocer personalmente a El Uali en esos años y la historia misma de la RASD lo confirma, constatamos que El Uali quería mantener las instituciones de la RASD a un segundo plano y fortalecer las instituciones del Frente Polisario para enfrentar mejor al enemigo ya que estas instituciones están más adaptadas a la realidad, son mas ágiles y más económicas.

La historia le dió la razón al fundador del Polisario y todos los éxitos ulteriores hasta los años ochenta se consiguieron gracias a esa estrategia y al espíritu revolucionario que entonces se hacía sentir en las filas del Polisario. Pero con ello no quiero decir que en esos años el Polisario no cometió graves errores, especialmente en contra de sus opositores politicos. Por más noble que sea el objetivo de la creación de tantos ministerios, tantos departamentos, tantas instituciones etc... todo ello choca con la realidad de una población refugiada en un territorio de otro país, sin ningún recurso excepto la ayuda humanitaria internacional. Y en vez de que dichas instituciones de la RASD sirvan para mejorar el nivel de vida y la gestión en los campamentos de refugiados, se han convertido en una carga económica y burocrática de la cual se benefician solamente los dirigentes de este movimiento. Es verdad que hay instituciones que tienen su repercusion positiva, pero hay que reducirlas para que sean funcionales y rentables. Acaso no es más práctico el relegar a un segundo plano algunos ministerios (excepto a los relativos al ejercicio de la democracia) de la RASD y dar más preferencia al fortalecimiento de las instituciones del Frente Polisario, ya que éstas estan más adaptadas a la lucha, a la realidad de los refugiados, cuestan menos, son menos burocraticas?

Esta misma pregunta la formuló el mismo Secretario General del Frente Polisario en otros terminos en la conferencia extraordinaria de cuadros que se celebró pocos dias despues de la sublebación de Octubre de 1988. El Secretario General djo textualmente: "hemos construido una cabeza inmensa, la cual las piernas no pueden soportar." Lo increíble aquí es que más tarde el Polisario en vez de proceder a una reforma para una mejor transparencia, más democracia y menos gastos, lo que hizo fué añadir otra cabeza a esa cabeza. O sea en lugar de reducir el número de responsables e instituciones inecesarias, aumentó.

Con la negativa de dialogar con la nueva oposición, los responsables del Frente Polisario no hacen más que poner más obstáculos en el camino de la liberación. Y una vez más nos confirman su distanciamiento de aquellos grandes revolucionarios que eran.

Personalmente pienso que dicha negativa legitima a la nueva oposición a seguir con sus planes y a buscar más vias pacificas con el fin de lograr una reforma politica dentro del Frente Polisario.

Acaso no sería más inteligente y más adecuado tender la mano a estos hermanos de lucha que no quieren juzgar a nadie, ni humillar a nadie, sólo buscan tomar el mejor camino para expulsar al agresor marroquí de nuestro país?. Hay que alejarse de los viejos esquemas y anticuados análisis y recuperar el coraje de antaño para que todos podamos juntos enfrentar la intransigencia de Marruecos.

07.12.2004

Los incidentes de 1988 fueron el primer evento de gran envergadura que buscaba la reforma dentro del Frente Polisario. Tal hecho fué como un fuerte terremoto político que sacudió fuertemente la cúpula de este movimiento ya que algunos de los componentes del gupo que reivindicaba la reforma eran miembros históricos del Polisario y otros hostentaban cargos de alto rango, como por ejemplo el Ministro del Interior, de exteriores, jefe de los servicios secretos, embajador en Argelia, etc...

El otro "bando" encabezado por el propio Mohamed Abdelaziz, Secretario General del Polisario y Presidente de la RASD, reprimió de forma brutal e inaceptable a los citados reformistas, alejandose de esta manera del espírito revolucionario y de la tradición ya arraigada desde siglos en nuestro pueblo, de solucionar los conflictos de forma pacífica y justa.

Desde aquellos incidentes, los actuales dirigentes dedicaron y dedican todavía mucho esfuerzo y energía en solo manipular a los que todavía circulan por su alrededor y en mentir y engañar a todo el pueblo, recurriendo a metodos como la trampa del tribalismo para así defender sus puestos, relegando así a un segundo plano sus responsabilidades nacionales.

Desde aquel tiempo, poco se ha hecho para sacar el Frente Polisario de su crisis politica y poco se ha hecho en el ámbito diplomático. Parece que éstos señores están esperando eternamente a una orden que venga del santo cielo. Es verdad que en algunos temas y casos, hay que consultar a los hermanos Argelinos, pero por otra parte no hay que olvidarse que este país tiene otras prioridades, otros problemas y otro ritmo diplomático. Tampoco se puede estar siempre esperando a resoluciones de la ONU o a informes del Secretario General de este organismo. Nuestra diplomacia no debe perder su camino, que es el camino de una diplomacia de un pueblo que lucha por la descolonización de su patria. Esta diplomacia tiene su carácter especial y se diferencia a la diplomacia convencional en muchos aspectos. Citaré aquí algunos requisitos que debe reunir dicha diplomacia especial: la austeriadad, la agilidad, la flexibilidad y mucha imaginación. Por ello no es de aceptar ni comprensible que muchos de los representantes del Frente Polisario en el extranjero, en vez de tomar el trabajo político como primer objetivo, han pasado a ser "representantes" de la media luna roja Saharaui. Bajo ningun concepto resto aquí importancia a la búsqueda de ayuda humanitaria para los campamentos de refugiados, pero las dos tareas son compatibles, es más respecto al tema humanitario, en los campamentos hay una buena organización y las instituciones donantes tienen ya una gran experiencia de colaboración con nuestro pueblo y es un tema ya encarrilado y bien encauzado. Lo que se necesita más es el trabajo político, particularmente en el Estado español, debido a las responsabilidades históricas de España con el tema del Sahara. Este deficiencia se dejó notar especialmente cuando la visita de Abdelaziz a Rodriguez Zapatero en Madrid. Era una oportunidad histórica para que el Polisario pudiera mostrar su capacidad y su peso político en este país, pero realmente es un trabajo que no está todavía a la altura debida. Por favor, que no se entienda de ésto que subestimo el apoyo de muchas y muchos españoles a nuestro pueblo. Muchos de los citados representantes del Sahara en Europa, se han apartado, y mucho, de sus tareas fundamentales y se dedican más a facilitar el permiso de residencia a sus familiares y amigos e incluso hacer del tema del permiso de residencia un negocio propio. Es más, hacen la vida normal como si fueran funcionarios de cualquier país independiente: están con sus familias, reciben sueldos sin que ellos mismos los ganen con su trabajo, al igual que los palestinos, que los chilenos, nicaragüenses, salvadoreños, vietnamitas etc... en su tiempo.

Hay una realidad, que no hace falta ser un genio para descubrirla, y es que la doctrina sobre la cual se basa nuestra lucha de liberación nacional, es una doctrina revolucionaria ajustada a nuestra realidad ya hace muchos años. Y solo continuando con esta doctrina estaremos en el camino justo que nos llevará a expulsar a Marruecos de nuestro país. La doctrina hecha conforme a la mentalidad de los funcionarios convencionales, no nos llevará a ningún sitio.

Ali uld Lembarki

17.12.04