Se engaña quien espera algo de estas negociaciones
fútiles, tal como empezaron así se acabarán. Estas
negociaciones están condenadas al FRACASO y a la deriva, van sin
rumbo ni dirección. Han empezado con el yo dar y nada recibir,
no hay reciprocidad, se pronostica desgaste, concesiones, dilataciones
y más candidatos a pasar al otro bando.
La cuestión no es, ciertamente, si MARRUECOS y el POLISARIO
habrán de negociar. La cuestión es, si se ha de negociar
respetando de forma incondicional el derecho de la población
saharaui a decidir libremente sobre su futuro, o sobre la propuesta
marroquí auspiciada por EEUU y Francia. Sin duda, el segundo
intento puede darse por muerto y enterrado, en lo que a nosotros
concierne. El enemigo no quiere escuchar ni de forma remota algo que
suena a referéndum de autodeterminación. Y a nosotros de
manera sustancial como saharauis, habido cuenta que los términos
del proceso han sido sobre lo primero, no sobre lo segundo. A Marruecos
solo le resta asumir que lo que ha de negociar con el POLISARIO no es
sobre su propuesta. Sino sobre su salida del territorio que ocupa, hace
más de tres decenios. Mientras tanto, la opción de la
beligerancia sigue siendo y a mi entender la única y mas viable
de la soluciones, para que el monarca entra en razón.
Ante este panorama, no cabe mas negociar, habrá que encender la
mecha de la vía armada. Nos llamen como nos llamen, me de igual
8 que 88. Hay detenciones todos los días en las zonas ocupadas,
torturas, extradiciones forzadas. El mundo entero esta expectante ante
los hechos y nadie mueva un dedeo, la misma ONU se jacta de nosotros
con sus orquestadas resoluciones. Y el POLISARIO en medio de todo este
tejemaneje, solo recurre a su vieja y dogmática tesis “nos
tildarán de terroristas”. Pues bienvenido sea el terrorismo; La
no guerra la no paz, es nuestra mayor frustración y si seguimos
por este periplo, estaríamos dándole más tiempo a
Marruecos para que reclute más adeptos a su tesis. Por lo cual
me adhiero de manera taxativa a lo planteado por el compatriota
Huneifa.
El tiempo juega un papel en contra nuestro. ¿Por qué?
Porque los Saharauis, y lo digo sin cinismo, son víctimas de su
éxito. Son víctimas de su propio éxito en lo que
concierne a la organización de su población en el exilio:
supieron crear un modelo. Si yo fuera Maquiavelo diría que
quizás se equivocaron de modelo para arrancarle su independencia
a la comunidad internacional. Es mejor transformar a su
población en una bestia feroz y no en ciudadanos inteligentes,
concientes, y educados totalmente. Y esta es la razón por la
cual el señor: Claude Bontems, Profesor de derecho de la
universidad de Paris, dice que el tiempo está en contra de
ellos. Estamos en presencia de una de las poblaciones africanas que
seguramente es la más escolarizada, y hoy qué porvenir se
le está ofreciendo?
¿Solamente la región de Tinduf?
¿Será que el Frente Polisario podrá mantener esta
línea de conducta? La de un movimiento de independencia cuyo
único acto terrorista que se le reprocha es el haberse tomado
tres barcos de pesca y haber rescatado a un eminente político
francés que sobrevolaba la región del Sahara
Español y que volvió totalmente convertido a la causa
saharauí.
El derecho necesita una forma de voluntad y una voluntad que debe ir
hasta la violencia para ser respetado. Sin esta voluntad de ir hasta la
violencia, el derecho no existe. Mientras la comunidad internacional se
contente diciendo que dejen que se aplique el derecho sin saber si este
derecho puede ser aplicado tal cual como se presenta, de una manera
autónoma, sin buscar a imponerlo, entonces cierto número
de causas no avanzarán. La causa Saharaui se encuentra hoy ante
la declaración obsoleta de los principios del derecho
internacional, arguyendo que son de otro tiempo, de otras costumbres y
sólo le quedará al Frente Polisario la posibilidad de
negociar y es lo que se le llame “ La independencia dentro de la
independencia”, solución que no se ha visto hasta ahora, o ya
sea, si se quiere que estos principios que parecieron ser principios
intangibles en 1960 se apliquen realmente, se necesitará que la
comunidad internacional deje de lado su cháchara para poder
entrar en el campo de la acción.
Anneo
Séneca
Hayat303@gmail.com
17.07.07